Cuando una mujer de clase media recibe una invitación a un evento de prestigio, ella no hace preguntas y empaqueta sus bolsas. Al llegar ella es inmediatamente consciente de las actividades en las que se espera que ella participe; adulterio, tríos, lesbianismo, sodomía y una pandilla. Con una gran sonrisa a través de su cara acepta, después de todo, lo bueno es Córcega sin un pavimento desviador