Durante varios años, Natalie ha sido perseguida por sueños intensamente sexuales que la dejan ansiosa por explorar su lado más desviado. Pero, cuando conoce a un chico que parece ser su pareja perfecta, le preocupa que se revele demasiado sobre sus deseos lo asuste. Dividida entre arriesgarlo todo y perder potencialmente algo grandioso, Natalie se pregunta si el lugar más seguro para sus fantasías es su mente.